jueves, 20 de agosto de 2020

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El ayuntamiento tala dos araucarias de más de 40 años en la urbanización La Verdellada


Los vecinos del bloque habían solicitado hace más de un año la citada tala por motivos de salubridad del edificio, acción que estaba pendiente de autorización técnica municipal.





El Ayuntamiento de La Laguna procedió los días 13 y 14 de agosto a realizar los trabajos de tala de dos ejemplares de araucarias, de unos 20 metros de altura y algo más de 40 años de antigüedad, que habían sido plantados a finales de los años 70 en los jardines del bloque 32 de la Urbanización de La Verdellada. Los vecinos del citado bloque había solicitado hace más de un año la poda o tala de los citados ejemplares por motivas de salubridad de sus viviendas, ya que al haber sido plantadas tan cerca de la fachada, los dos arboles generaban excesiva sombra y humedad a las viviendas, sumado a las molestias por los insectos y salvia del arboles.

Las citadas araucarias fueron plantadas a finales de los años 70, hace más de 40 años, en los jardines delanteros del bloque 32 de la urbanización, y con su crecimiento fueron tapando las vistas de las ventanas y balcones del bloque hasta superarlo en altura hace algo más de cinco años. Desde entonces los vecinos han ido presentando peticiones de poda para garantizar airear la fachada y viviendas, y garantizar con ello su salubridad. 

No obstante, a inicio de 2019 solicitaron que se estudiará la viabilidad de su tala definitiva, propuesta que quedó en manos del servicio técnico de parques y jardines para su evaluación desde entonces. A mediados de este mes de agosto, el citado servicio técnico de parques y jardines consideró la viabilidad de la propuesta y desde los servicios de mantenimiento de parques y jardines del Ayuntamiento de La Laguna se procedido a su tala definitiva. 

Los trabajos han sido bastante laboriosos dada la altura de los dos ejemplares (más de 20 metros de altura), por lo que se tardó 2 días en realizar los trabajos, para los que se utilizó una grúa, sierras mecánicas y se cortó la calle Emilio Gutierrez Salazar para la realización de los mismos. Pese a que no existía unanimidad vecinal en la decisión definitiva de la tala de estos dos gigantes árboles, lo cierto es que los vecinos del bloque ahora mejorarán la salubridad de sus viviendas con mayor luminosidad y ventilación.

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