miércoles, 13 de julio de 2011

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La Verdellada celebra este año las fiestas patronales más austeras de la última década

La reducción de ingresos de colaboradores y el recorte de ayudas del Ayuntamiento de La Laguna para priorizar Servicios Sociales lleva a las fiestas a las cifras de hace diez años. Los Verdeños afrontan los recortes con pena pero también con gran responsabilidad.



Pese a que la Asociación de Vecinos Los Verdeños ya preveía este escenario de recortes hace un año, lo que le dio tiempo para prepararse mejor y empezar las recaudaciones de colaboraciones casi al finalizar las fiestas  de 2010, lo cierto es que el recorte realizado no deja de ser duro por pasar ya el 50% de los gastos.  Los apartados de la fiesta que más están notando el recorte son la decoración, los bailes, el concierto joven que desaparece,  la publicidad impresa que se concentra toda en el libro principal, los fuegos, o los actos deportivos que pasan a ser en su mayoría pagos.

Solo con la eliminación del programa de actos, del concierto joven que el año pasado trajo al barrio al artista puertorriqueño Edwin Rivera, las fiestas ahorran casi 20.000 euros que fue lo que costó el citado acto, entre el cache del artista que pagó la asociación de vecinos, la iluminación y sonido que pago el ayuntamiento, y la publicidad y seguridad del evento que fue patrocinada por Coca Cola. Luego en bailes que se quedaran en dos en vez de 3 o 4 como en ediciones anteriores, el ahorro también es importante.

En cuanto a la decoración, este verano no se estrenarán banderas nuevas, todo será reciclado y además, se reducirá a la mitad la iluminación con rosarios o arquerías en las calles. La Comisión de Fiestas ha decidido concentrar la iluminación en la Plaza Mayor y calles aledañas, mientras que la decoración se reducirá a las zonas donde se desarrollan actos o paradas de la Virgen. En cuanto a fuegos artificiales, se quemarán los de las promesas que los pagan los propios vecinos y la exhibición final se reducirá a la mitad. También se ha reducido a la mínima expresión la edición de carteles, que han quedado en algo simbólico para no perder la tradición, al tiempo que el libro de las fiestas se ha logrado financiar con la publicidad.

Con estos recortes, que dejan las Fiestas Patronales en torno a los 30.000 euros de presupuesto, más de la mitad de lo gastado en 2010, tenemos que remontarnos hasta hace 10 años para encontrar una cifra similar, con una ligera diferencia, y es que hace 10 años el Ayuntamiento ya aportaba el 50% de los gastos, y en esta ocasión, por ahora, tan solo abonará las facturas de la infraestructura del escenario y la iluminación y sonido de las galas.

Pese a los recortes, la Asociación de Vecinos Los Verdeños espera saldar las fiestas sin deudas, ya que a la fecha de la presentación del programa inicial ya contaba con una recaudación cercana a los 20.000 euros, por lo que espera completar el presupuesto de gastos previstos con la recaudación de la terraza de verano y su cantina, así como con los últimos pedidos de las fiestas por las casas del barrio. Pese a todo, Los Verdeños agradecen la colaboración recibida por el Ayuntamiento de La Laguna, ya que entendemos perfectamente los recortes, como esperan que los entiendan los vecinos cuando vean menos cosas que otros años en las fiestas.

MENOS ACTOS PARA SALVAR LAS GALAS

La prioridad en las Fiestas Patronales de La Verdellada son los actos tradicionales en los que más se implican los vecinos del barrio, como por ejemplo las galas, la Bajada del Diablo, o los actos religiosos en honor a la patrona, frente a los destinados a atraer foráneos como han sido los conciertos, bailes o algunos actos deportivos. Con esta filosofía se ha configurado el programa de actos de este año, donde se ha apostado por mantener lo imprescindible y suspender o reducir los actos menos participativos o caros.

Entre los actos que se han suspendido para ahorrar costes destacan el concierto joven, que era casi el 30% del presupuesto total de las fiestas, la ofrenda folklórica del domingo grande que cada año tenía menos público, la reducción de verbenas, o como nota a destacar la suspensión del Cross de La Verdellada, por ser inasumible a última hora los gastos que se derivaban del mismo por la retirada de patrocinadores privados.

Los actos que traen consigo grandes recortes son el baile de magos, donde a espera de las colaboraciones comerciales no está previsto servir comida y cada uno tendrá que traer la suya. Los fuegos artificiales, los bailes,  y los actos deportivos. Mientras que los actos que se mantienen son las galas, los juegos infantiles, el pregón y los actos religiosos. Pese a los recortes, hay sitio para las novedades como el encuentro de bandas de cornetas y tambores que organiza y financia la Asociación Musical Sentir Verdeño.

Moisés Afonso, Presidente de Los Verdeños indicó que “tenemos que asumir con responsabilidad todos los recortes y las medidas de austeridad en nuestras fiestas grandes, y demostrar que con menos dinero podemos mantener el espíritu y la esencia de nuestra tradición, y dejar para tiempos mejores los grandes conciertos y demás”. “Cuando no hay dinero, no lo podemos inventar, ni gastar más de lo que tenemos, porque las fiestas no pueden dejar deudas que luego estemos pagando todo el año”.

Moisés destacó que en La Verdellada tenemos muchas actividades y fiestas durante todo el año, y hemos ido aplicando recortes en todas ellas para poder mantener el listón en las fiestas patronales, pero el tema económico cada vez está peor, y ni con esos recortes podemos asumir el gasto de años anteriores en las grandes.  “Tenemos la suerte de ser un barrio maduro y responsable, y en los últimos días han venido muchos vecinos a ofrecer ayuda y apoyarnos en los recortes, por eso creemos que las fiestas serán un éxito porque la gente en vez de amularse y patalear se han ofrecido arrimar el hombro para empujar del carro, y eso dice mucho a favor del barrio”.

Afonso reconoció que “duele tener que asumir estos recortes por lo que significan las fiestas patronales para La Verdellada, pero está convencido que con menos también podremos hacer unas grandes fiestas, y las tendremos, porque si algo sabemos hacer en La Verdellada es vender bien todo lo que hacemos, y a veces es más un tema de imagen que de fondo”. “Hemos priorizado en lo que más le gusta a nuestros vecinos, lo que más esperan y en lo que más participan. No les vamos a defraudar con su gala, pero tiene que saber que para mantenerla hemos tenido que sacrificar muchas cosas”. 

Afonso concluyó aclarando que “pese a los recortes de la aportación del Ayuntamiento de La Laguna que se limitan casi en exclusiva a la infraestructura de escenario, sonidos e iluminación, no quiso olvidar el agradecimiento a esta aportación, ya que sin ella, sería inasumible la realización de las fiestas. Hemos estado en las gordas y ellos también, y ahora tenemos que estar también en las flacas. Los artistas, bailes y fuegos los pagará el barrio con el dinero recaudado este año.