viernes, 7 de octubre de 2016

NOTICIAS

Los Verdeños trabajarán para conseguir el desarrollo de proyectos estructurales que generen actividad económica y empleo en La Verdellada

Moisés Afonso anuncia en su toma de posesión como presidente de Los Verdeños, los objetivos claros de lucha vecinal en los próximos años: el Cemuve, rehabilitación de viviendas, actividad económica y con ella empleo.

Moisés Afonso en el momento de finalizar su discurso de toma de poseción. 

Varios miembros de la nueva Junta de Gobierno de Los Verdeños en la Plaza Mayor.

Este viernes 7 de octubre se ha celebrado en el Centro Ciudadano de La Verdellada la Asamblea General Extraordinaria en la que ha tomado posesión la nueva Junta de Gobierno de la Asociación de Vecinos Los Verdeños, elegida en las elecciones celebradas el pasado sábado 1 de octubre. Moisés Afonso asumió de esta forma la presidencia por quinto mandato consecutivo y lo ha hecho con un equipo renovado y con uno de los discursos más maduros que se recuerden en historia de Los Verdeños, muestra de la consolidación y seriedad organizativa de la asociación de vecinos de La Verdellada.

Moisés Afonso (27 años), anunció que su equipo apostará por un plan de acción que se aleja de lo que considera obligatorio y que da por hecho que se hará, es decir, trabajar por tener unos servicios públicos eficaces o un mantenimiento viario racional, para marcarse objetivos estructurales serios que generen actividad económica estable y con ellos más empleo en la zona. Moisés tiene claro que La Verdellada ya no está para jugar al asociacionismo del siglo pasado, sino para pensar en el futuro y en el bienestar general del barrio.

Proyectos como el Cemuve, el centro que pretende ser el centro de impulso de la actividad económica, social y laboral de la zona encabezan unos objetivos de trabajo que también incluyen terminar la rehabilitación de la Urbanización La Verdellada, mejorar los enlaces y conexiones de La Verdellada con la Vía de Ronda para acabar con las colas, o sacar adelante el plan de recuperación del barranco para convertirlo en polo de atracción con la conservación y protección de su patrimonio.

Los Verdeños también se marcan como reto activar el plan de promoción de la marca comercial de La Verdellada, para con ella fomentar la apertura y mantenimiento de la actividad empresarial de la zona, vital en el mantenimiento y potenciación del autoempleo y la emprendeduría como vía de salida al alto índice de paro en la zona.

Moisés Afonso enhebró un discurso brillante; “No podemos permitir que nuestros jóvenes sin formación sigan viviendo a expensas de planes de empleos temporales o ayudas sociales, que como recurso de primera necesidad están bien, pero no son la solución a largo plazo. Tenemos que apostar por formarlos, dónde el Cemuve puede ser fundamental, y ayudarles a que emprendan negocios autónomos que les permitan salir adelante y generar economía. Menos dependencia y más autonomía, no hay mejor política social que esta, ayudarles a formar sus propias empresas y negocios para vivir. Es sacrificado?, pues sí, pero lo otro es crear una sociedad dependiente y sujeta frágilmente a un futuro de continuas incertidumbres”.  

Estos proyectos ejes programáticos, se complementan con otras acciones en las que trabajará la asociación en esta nueva etapa, como la mejora y ampliación de las zonas verdes en la zona, consolidar los acuerdos logrados para el nuevo PGO de La Laguna, la generación de nueva actividad socio cultural enfocada a potenciar el sentimiento de pertenecía al barrio entre jóvenes y vecinos, o la continuidad en la apuesta por el mantenimiento, conservación y transmisión generacional de las tradiciones del barrio, que tendrán un punto fuerte en 2017 con el 50 aniversario de las Fiestas Patronales.

Moisés Afonso terminó su presentación agradeciendo el apoyo de todos los vecinos, y pidió a las administraciones públicas colaboración para entre todos sacar adelante los proyectos que el barrio necesita, y en los que una vez más, La Verdellada puede ser el germen y el prototipo a seguir de un modelo de asociación de vecinos de implicación, participación y desarrollo comunitario propia del nuevo tiempo, del nuevo siglo.

Afonso concluyó adelantándose a su tiempo y avisando que las asociaciones de vecinos deben adaptarse a los nuevos tiempos para seguir siendo útiles en una sociedad cada vez más autónoma e independiente, dónde como entidades cívicas, vehículos de participación e implicación vecinal, deben ser más entidades de cohesión estructural de los barrios, y menos meros actores secundarios a expensas de las olas políticas de turno o voluntades personales de sus directivas.