PALABRAS DEL SEÑOR PRESIDENTE DE LA ASOCIACIÓN DE VECINOS TINGUARO, DON JUAN LUÍS MARÍN CARVAJAL, CON MOTIVO DE LA BIENVENIDA DE LA VIRGEN DE LOURDES EN LA VISITA A LA PARROQUIA DE BARRIO NUEVO
Buenas tardes.
He sido
designado para decir unas palabras en representación de las asociaciones
vecinales de Barrio Nuevo.
11 de Febrero de
1952 Colocación de la 1ª Piedra.
1 de Mayo de 1960
Bendición como ermita.
14 de Mayo de 1963
Fue creada como Parroquia, siendo Obispo Don Luís Franco Cascón.
Este año se
cumple el 50 aniversario de la designación como Parroquia, por lo que todos
queremos unirnos a la celebración con un recuerdo en el tiempo al Párroco Don
José García Pérez y al Obispo Don Domingo Pérez Cáceres, por la colocación de
la 1ª Piedra, así como a los vecinos, Ayuntamiento y empresas que se implicaron
en dicha tarea.
Aquí hoy tenemos
dos imágenes, dos nombres distintos, pero una misma Madre, un mismo
significado, una misma Fe.
Esta zona siempre
ha estado marcada por la sencillez y laboriosidad de sus habitantes. Hoy, este
año, esperamos, deseamos, rogamos, que se vea marcado con el inicio de mejores
perspectivas en todos los aspectos, tanto laborales, como familiares o
espirituales.
Que esta visita
se vea acompañada por generosa lluvia física, como la que necesitan nuestros
campos, pero también por lluvia de bendiciones, bendiciones que nos permitan
sentarnos a la mesa y compartir el pan, la amistad y la fraternidad.
Agradecemos a
los Vecinos de la Verdellada, así como a sus dirigentes vecinales el haber
traído en visita la Imagen de Nuestra Señora de Lourdes, como un acto de
cercanía, de buena vecindad, dentro de los actos de la conmemoración del 50
aniversario como Parroquia.
Que este año de
la Fe se vea también acompañado de la Esperanza y de la Caridad.
De la Fe, como
confirmación de nuestra creencia en algo más que este mundo físico.
De la Esperanza,
en superar los inconvenientes del día a día, viéndolos como pruebas y
oportunidades para sacar de nuestro corazón y de nuestra mente lo mejor.
De la Caridad,
para no tener la mano cerrada, sino tenderla abierta y generosa, tanto al
necesitado, como en señal de sincera hermandad.
Que así sea.
Barrio Nuevo a 8 de febrero de 2013.
No hay comentarios:
Publicar un comentario